Amanecer rojo 2. Hijo dorado.

Segunda parte de la saga Amanecer rojo. Siguen las conspiraciones, se deshilvanan algunas tramas anteriores, se crean otras más adictivas aún. Darrow ha madurado y se nota, un personaje más formado, más completo, más complejo y más humano. Tiene rabia, fuego, hambre, de guerra, pero también ganas de paz, de tirar abajo los muros de la sociedad actual, de ver florecer a la humanidad como seres individuales y no por colores o clases sociales.

Un tomo dónde las segundas partes si son buenas, buenísima en este caso, un libro lleno de acción, de estela dorada, de supervivencia... aunque es una historia de ficción, tiene una denuncia social plagada de paralelismo con la realidad. Porque la historia se repite, pasen los años que pasen.

Podremos conocer en profundidad algunos personajes más, sus alianzas y su nuevo posicionamiento. Yo ya he odiado algún personaje.

¡No es un segundo tomo tranquilo y sosegado para llevarte hasta un apoteósico final, No! Es un libro con vida propia, con mucho ritmo, muy cuidado en detalles y en narrativa.

Sigo recomendando esta saga si lugar a dudas.