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Este libro es una edición maravillosa, empezando desde la portada con relieves, pasando por el texto de Sébastien y acabando por las magníficas ilustraciones en sepia de Benjamin Lacombe. Victoria Appenzell nos cuenta a través de cartas y fotografías que le dejó su abuela Eugénie Appenzell y de momentos que ella misma ha vivido, la historia de su peculiar familia. Es una historia preciosa. Los Appenzell eran banqueros y muy respetados, pero uno de sus hijos, Charles, que va siempre con una máscara se escapó y se casó con Bérénice, de esa unión se fue creando una familia en la que todos y cada uno de ellos tenían sus peculiaridades y rarezas. En cada ser que se nos presenta se puede ver el amor y la unión de familia sobretodo por parte de Eugénie pero también sus miedos y sus inquietudes, en cada uno de ellos se puede apreciar un trasfondo de lo que les sucede. En cada ilustración se aprecia y ve dentro de cada uno de ellos, el hecho de que vayan en color sepia es una delicia. Al final del todo aparece un árbol genealógico para que no te pierdas con los parentescos. Creo que la unión entre el texto de Sébastien y las ilustraciones de Lacombe han creado una verdadera joya. Si tengo que quedarme con algún personaje me quedaría sin duda con Eugénie, Ondine y Victoria Appenzell |
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