Trafalgar

Grata sorpresa la mía al haberme atrevido a comenzar los Episodios Nacionales, puesto que tenía ciertas reticencias por toparme con una lectura densa o que simplemente no cumpliera las expectativas que había ido alimentando durante años. Nada más lejos de la realidad.

En “Trafalgar”, Galdós recurre a la creación de personajes ficticios (recurso característico en estos Episodios que el autor utiliza para hilar los acontecimientos históricos) para recrear la gran batalla naval que tuvo lugar en 1805. A través de estos personajes y tejiendo una historia en torno a los mismos, en cuyo centro se encuentra Gabriel, personaje principal y narrador de este episodio, el autor canario referirá los días previos y las circunstancias que desembocaron en esta batalla, realizado una verdadera crónica de los días aciagos en que se desarrolló la misma.

Gabriel es un niño pícaro de apenas catorce años cuya percepción romántica de las batallas navales lo llevará a acompañar a su amo, capitán de navío retirado, hasta la cubierta misma del Santísima Trinidad, viviendo así la crudeza de la batalla con la pérdida de vidas que supone. Con Gabriel recorreremos sus andanzas amorosas y juegos inocentes, animándonos la lectura con situaciones cómicas y divertidas.

Es de destacar los diálogos de los personajes, los cuáles me lleva a pensar en las posibles reflexiones de los ciudadanos de entonces acerca de los acontecimientos que estaban viviendo. Los rumores, las críticas a un rey títere entregado a la causa del francés, el desgaste y menoscabo del pueblo español por las pérdidas resultantes de tanta batalla, todo esto teñido por el patriotismo y la honorabilidad de estos hombres dedicados a la lucha por su patria a costa de su propia vida.