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Elena Maldonado es una prestigiosa psicóloga. Tiene su consulta en el barrio de Salamanca y publica libros sobre la materia en la que es experta lo que la ha convertido en una voz muy conocida en su campo. Un día recibe un extraño correo electrónico: alguien que firma como E le dice que en unos días va a asesinar a uno de sus pacientes y que ella será quién decida a quién. Elena se lo toma como una broma pero no lo es. Cuando se da cuenta de que E va en serio y que, si no hace lo que le pide, su hija Tadea sufrirá las consecuencias, empieza una carrera contrarreloj de Elena para descubrir quién es E y pararle los pies. Me encantan los thrillers, no es un secreto. Y dentro de los thrillers los psicológicos son mis preferidos. Y, rizando el rizo, si la persona que va a sufrir las consecuencias de la mente de un perturbado es un psicólogo (como ocurre en libros como “El psicoanalista” de John Katzenbach o la trilogía de María José Moreno) ya es el no va más. Esto es lo que me he encontrado en esta novela: un asesino pretende jugar con una psicóloga. Una mente perturbada y una mente que se dedica a tratar con ese tipo de mentes en un juego macabro, ¿quién ganará? La novela se estructura en ocho capítulos más un epílogo subdivididos los primeros en subcapítulos, escenas o como queráis llamarlos. Es la propia Elena, clara protagonista de la novela, la encargada de contarnos la historia. Un acierto en este caso pues nos permite meternos en su piel, vernos amenazados por un psicópata y vibrar con ella. Ocasionalmente, hay ciertas escenas con un tipo diferente de grafía y escritas en tercera persona . El libro tiene la estructura propia de los thrillers. Los subcapítulos son muy cortos. La narración es muy ágil, abundando el diálogo. La sensación de prisa, de que Elena tiene que actuar deprisa y tú lector debes leer también rápidamente es muy intensa. La facilidad de lectura también. Estamos ante el típico libro que se devora, que se lee sin enterarte, que te mantiene enganchado desde el principio hasta el final y cuya lectura no da un respiro. Elena es una buena protagonista. Tiene las herramientas para tratar con lo que está tratando pero está implicada personalmente por lo que la sensación de angustia es bastante acusada. La autora consigue que nos metamos en su piel, que sintamos lo que ella siente y su necesidad de actuar. Acabaremos conociéndola bastante bien; es cierto que de forma parcial pues ella es la única narradora, pero nos contará cosas de su pasado, de su hija Tadea, de sus amigas..; a pesar de que el libro es tirando a corto su personaje está bien desarrollado. Conclusión final Si os gustan los thrillers psicológicos y los libros para devorar, tened este en cuenta. Yo he disfrutado muchísimo leyéndolo. Enlace: http://librosquehayqueleer-l.. |
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