Quizá una de las imágenes más famosa de Alice Prin, más conocida como Kiki de Montparnasse, sea la de la mujer de sinuosa espalda sobre cuya piel se dibujaron dos efes (orificios en la tapa superior del violonchelo). Todos conocemos al autor de esta fotografía: Man Ray, pero ¿quién se esconde tras ese rostro apenas visible? Por aquel entonces, Kiki era la amante de Man Ray y es probable que esa sea la faceta por la que hoy muchos la conocen. O por haber sido también la amante de Modigliani u otros muchos artistas del periodo de entreguerras. Pero si indagamos un poco en su vida descubriremos que fue muchísimo más de lo que nos han querido hacer creer. En “Recuerdos recobrados. Memorias”, editado por @nocturnaed la conoceremos como una mujer libre e independiente que fue parte de la escena parisina de principios del siglo XX. Kiki fue musa, sí, pero también fue cantante, modelo y actriz. Los inicios de la “Reina de Montparnasse” no fueron fáciles: una madre que la abandonó, una infancia sumida en la pobreza y en el hambre hicieron de Kiki una mujer independiente quizás demasiado pronto. Trabajó en fábricas y talleres, como modelo ocasional y como prostituta. Poco a poco se estableció, conoció gente, alcanzó cierta fama como cantante de variedades, se estableció en Nueva York una breve temporada, financió la revista Paris-Montparnasse e incluso realizó alguna exposición con los dibujos que pintaba y que, en esta edición, se publican junto a los capítulos. Con treinta años, tras superar sus problemas con el alcohol y las drogas, decidió reordenar los fragmentos de su vida y escribir sus memorias. Su voz inocente, entusiasta y atormentada, nos transporta a la vida artística del Montparnasse de los años veinte. En el prólogo nos dicen que su escritura era algo descuidada, pero su intención no es ofrecernos un relato novelesco de su vida, sino narrarnos su historia con total humildad. Y, por supuesto, lo hace. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. + Leer más |