Libro de esos que se me antojan por la portada y la contraportada. La premisa de la historia es que la humanidad ha perdido su capacidad para dormir de forma natural tras una guerra nuclear. ¿La solución? Un dispositivo que se coloca en el ojo al nacer a lo bebés. Y que se recarga de tiempo REM, el nuevo dinero que sustituirá al tradicional pero que seguirá manteniendo la tradicional diferencia entre ricos y pobres es decir entre las personas REM que tienen horas infinitas para dormir y para adquirir productos y los No REM que malviven con muy poco e incluso mueren por no poder dormir. Una novela de corte juvenil, que mezcla la distopía y la ciencia ficción de forma magistral… Novela de prosa sencilla, de lectura fácil pero por contra con un final que piensas que será obvio y sin embargo la autora te confundirá hasta llevarte a un final sorprendente e inesperado. Los últimos capítulos los devoré. Un novela que brinda unas horitas de diversión. Si te gusta la ciencia ficción vale la pena darle una oportunidad. |