Lo que la marea esconde

Me gustan los misterios y los asesinatos bien ejecutados que no dejan nada al azar. Soy una ferviente admiradora del Sr. Poirot, de Miss Marple y de Sherlock Holmes. Me encanta hacer conjeturas y me entusiasma llegar al final del libro sin haber dado una. Nada es lo que parece y eso hace las lecturas más interesantes.

En esta cuarta entrega la teniente Valentina Redondo y su equipo, se enfrentarán a un asesinato complicado, cualquiera puede ser el culpable.

Ha sido una lectura entretenida y que me ha enganchado. He seguido las pistas y al final me he llevado una grata sorpresa, no tanto por el quién sino por el cómo. Me ha parecido muy ingenioso.

He vuelto de viaje a Santander y he pasado por delante del Club de Tenis de camino a la Magdalena, después de haber visitado la playa del Camello. Siempre es un placer volver a esta maravillosa ciudad.

Me ha parecido muy interesante, cómo a través de los problemas personales que Valentina atraviesa, la escritora nos hace reflexionar sobre la forma que tenemos de conducirnos ante una pérdida, y cómo si tomamos decisiones pensando en los demás, quizás no siempre son las correctas. Cada uno debemos poder decidir qué será lo mejor para nosotros.

Seguiré buscando el asesinato perfecto...éste casi lo es.