La chica que amaba a Tom Gordon

La historia está dividida como si fuera un partido de béisbol, es decir, en lugar de capítulos, se divide en entradas. Me parece una forma interesante de dividir el libro.

Es un libro corto, de poco más de doscientas páginas, por lo que es fácil y rápido de leer.

La historia comienza con Trisha recordando cómo se perdió y lo que pasó un poco antes. Después ya nos situamos con Trisha perdida. Entonces comenzamos a vivir todo lo que ella vive. Vemos su miedo, todo lo que piensa, los problemas que va teniendo y como los supera…aunque esto es algo interesante, a veces se me hacía aburrido ya que algunas partes son algo tediosas.

Creo que le falta misterio y algo más de acción, porque a pesar de que tienes ganas de saber que pasará, no estás enganchada ni te mueres de curiosidad y a veces la historia peca de ser lenta y sin que pase realmente nada. Pero eso sí, reconozco que tiene su punto de suspense, y mezcla muy bien la realidad con el mundo onírico, haciendo que llegue un momento que no sabes cuál es cual.

La ambientación es buenísima, ayudando a crear una sensación de incertidumbre y una ligera opresión en el pecho, aunque en ningún momento he llegado a tener miedo.

Sin dudas la historia gana puntos gracias a la protagonista. Luego hablaré a fondo de ella, pero me gusta muchísimo.

Conforme avanzas en la lectura, la trama se vuelve más absorbente, y se comienza a alternar la historia de Trisha con lo que viven sus padres (aunque esto sale en pocas ocasiones y está más centrada en la historia en Trisha).

El autor logra que conectes con Trisha y que sientas lo mismo que ella, haciéndote pasar más de un mal rato.

La voz fría que escuchaba Trisha en su cabeza no me gustaba nada. La veo como la parte negativa y pesimista de ella, en contrapunto a lo optimista que Trisha se muestra. Pero esa voz da mucho juego y hace que el lector se meta más en la historia.

El final no está mal, pero para mí es un pelín flojo. Hay un par de cosas que podrían haber dado mucho más de sí pero que acaban siendo demasiado normales. Podría haber sido un final mejor, pero también peor, así que dejémoslo en que el que hay es aceptable aunque mejorable.

King describe perfectamente todo, al detalle cómo es bastante normal en él, pero sin hacerse pesado. Me encanta como escribe este hombre, así de sencillo.

En cuanto a personajes, tan solo hablaré de la protagonista.

Trisha es genial. Es una niña de nueve años a la que le gusta el béisbol, o mejor dicho, un jugador, Tom Gordon. Es muy realista y cercana ya que reacciona y actúa tal y como haría cualquiera en su situación. Además, es una niña simpática, que te saca más de una sonrisa a lo largo de toda la trama. Demuestra tener mucha inteligencia muchas veces, inteligencia que ya quisieran tener muchos y muchas veces piensa las cosas más fríamente de lo que cabe esperar en una niña de su edad.