Rómpeme, Mátame

Me adentré en esta novela sin saber nada de ella, solo lo que la portada apunta: Rómpeme Mátame, un gancho, sangre y un fondo amarillo intenso, de esos que te llaman la atención en la librería.

Con un comienzo potente, viajaremos de Madrid a Salamanca de la mano la Bricex, una brigada creada para tratar casos especiales, liderada por René Chariot que vuelve a sus orígenes para ayudar a sus antiguos compañeros a desentrañar un peculiar caso de asesinato.

Es un libro que se sale de los cánones del thriller al uso y se adentra en lo que podríamos llamar thriller erótico. Desde luego la trama principal es el caso al que se enfrentan nuestros protagonistas pero durante la historia vamos a encontrar varias escenas muy subidas de tono no aptas para mentes puritanas.

La historia está muy buen contada, me ha gustado muchos el estilo de Alberto, su manera de mezclar diálogos con narración y como te adentra en los escenarios de Salamanca.

Los personajes principales están muy bien perfilados, quizás con alguno peca de abusar un poco de clichés pero encaja a la perfección con la historia que nos quiere contar Alberto. He de decir que no he empatizado con ninguno de los protagonistas, René me ha parecido un prepotente y Salas excesivamente intensa. Mi favorita sin duda es Anna. ¿Por qué? Ah, pues tendréis que conocerla para saberlo.

Mi sensación general con este libro ha sido como una montaña rusa, comienza subiendo con bajadas pequeñitas, llega un punto en el que el autor da una pista, sutil que te hace esperar un gran final, como si vieras un super loop a lo lejos, pero el loop no llega y parece que llegas a una recta en la que se resuelve el caso y ya toca bajar, peeroooo, no, el cacharro arranca de nuevo y hace la gran subida final, de esas en las que gritas a la bajada.

En definitiva que el final me ha gustado mucho, es cierto que tiene alguna cosita difícil de creer que no os puedo contar pero en su conjunto me ha gustado mucho el desenlace.

Os recomiendo esta lectura sin duda. ¡Ah! Que se me olvidaba, todo el libro está regado con perlas musicales que a muchos os transportará a otro momento de vida.

“Por eso rómpeme, mátame, pero no me ignores, no, mi vida.
Prefiero que tú me mates que morirme cada día”

Dos fueron los motivos que me llevaron a elegir “Rómpeme mátame”. Por un lado ese color amarillo tan llamativo de su portada (mi color favorito), y por otro el hecho de estar ambientada en Salamanca, mi ciudad. Parece que los thrillers y las novelas negras solo pueden estar ambientadas en las grandes ciudades, y se agradece de vez en cuando que transcurran en otros escenarios.

Centro histórico de Salamanca. A pocos días de las navidades, el cadáver de una mujer es hallado en el sofá de su casa sentada frente al televisor. Su cuerpo desnudo aparece cubierto por un albornoz y en sus pies lleva unos zapatos de claqué. En su pecho ensangrentado aparecen grabadas tres letras. René Chariot, inspector de la Policía Nacional y jefe de la BRICEX (Brigada de Crímenes Extraños) viajará desde Madrid con su equipo para hacerse cargo de la investigación, investigación que le llevará a revivir su turbulento pasado en la capital salmantina.

El título, “Rómpeme mátame”, hace referencia a una canción de Trigo Limpio, y es que la música está muy presente en la historia. La novela es una mezcla de sexo, violencia y rock and roll, con un buen equilibro entre ellas. Se podría definir como novela negra con tintes eróticos y, aunque esto último no suele gustarme demasiado ya que la inmensa mayoría de las veces no aporta nada a la historia, en este caso resulta un elemento fundamental en la resolución de la trama y para entender a los personajes y su forma de actuar.

La historia está narrada a dos tiempos, consiguiendo mantener un ritmo ágil y constante gracias a un lenguaje claro y sencillo, una acción que va in crescendo y una investigación policial que resulta creíble y que presenta algún que otro giro que conduce a un desenlace que resulta inesperado y que podrá gustar más o menos, pero estoy convencido no dejará a nadie indiferente.

El trío protagonista formará un peculiar triángulo, tanto en lo profesional como en lo personal. Aunque los tres tienen algún que otro cliché, lo que hizo que no llegase a empatizar del todo con ninguno de ellos, los personajes son plenamente conscientes de quiénes son y actúan de manera acorde, por mucho que desde fuera puedan parecer comportamientos poco creíbles.

Uno de los aspectos que más he disfrutado ha sido (como no podía ser de otra manera) la ambientación en Salamanca. El conocer a la perfección el centro histórico de la ciudad, y el poder reconocer las calles que recorren los personajes o los locales que frecuentan, hizo que entrase mucho más en la historia desde el principio.

“Rómpeme mátame” es suspense, sexo, música, violencia y algo de humor pero, sobre todo, es un prometedor debut en la carrera como escritor de Alberto Muriel Pina.

"Rómpeme, mátame" es un intrigante thriller policial que nos sumerge en el misterioso caso de una mujer encontrada muerta en circunstancias enigmáticas. Ambientado en el Centro Histórico de Salamanca, el libro nos presenta al inspector René Chariot, quien se ve inmerso en una compleja investigación que parece no tener salida.

Acompañado por la oficial Eva Salas, Chariot se adentra en un mundo de secretos y turbulencias que los llevará a revivir su pasado en la capital salmantina. Con una narrativa que alterna entre dos tiempos, el autor teje una trama llena de suspenso y erotismo, manteniendo al lector en vilo hasta el desenlace.

Aunque al principio la parte erótica del libro me parecía un añadido algo forzado e irreal, a medida que avanza la trama, se revela su sentido y relevancia en el desarrollo de la historia. Este elemento, lejos de ser meramente decorativo, contribuye de manera significativa al clima de tensión y al desarrollo de los personajes, añadiendo capas de complejidad a la trama y sorprendiendo al lector al final.

Con giros inesperados y una atmósfera cargada de tensión, "Rómpeme, mátame" es una mezcla de novela negra y erótica que entretiene mucho, su lectura se hace muy amena según está escrito no pudiendo parar de leer.

 Creo que es la primera novela del autor y me ha sorprendido positivamente. recomiendo su lectura.