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Lale Sokolov fue capturado y llevado a un campo de concentración, en donde le fue encomendada la tarea de tatuar los números en las víctimas, que como él, eran encerradas en Auschwitz. Una mañana, en la fila de prisioneros que esperaban para ser tatuados, una joven temblorosa llamó su atención. Para él fue amor a primera vista y se juró que, si lograba salir del campo, la buscaría hasta encontrarla. Así es como nace este hermosa historia de amor y supervivencia que conmueve al lector que pasa por sus paginas conociendo el horror de los campos de concentración. Lo primero es destacar el gran trabajo de la autora para conseguir una novela muy bien documentada. En donde conocemos la increíble historia de Lale y Gita, dos personas que encuentran el amor en medio del horror y sufrimiento que los nazis provocan al pueblo judío. Es así como nos vemos envueltos en una historia estremecedora, emocionante, pero sobre todo esperanzadora. Somos testigos del sufrimiento de nuestros protagonistas pero también de sus inagotables ganas de vivir, de seguir adelante a como de lugar, recuperar sus vidas y aquello que se les fue arrebatado. A lo largo del libro conocemos la historia y algunos personajes, en ciertos aspectos sentí que la autora no logro transmitir del todo aquella emoción necesaria, tampoco enfatizo en algunos personajes. Pero teniendo en cuenta de que se trata de una historia documentada en base a la realidad y personajes descritos en base a la realidad, es bastante recomendable para quien este interesado en conocer la historia de ambos protagonistas. |
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