La bestia

Estábamos deseando que volviera Carmen Mola, de hecho todos creímos que Las madres sería su siguiente novela, y sin embargo la sorpresa fue conocer que se alzaba con el premio Planeta en su última edición, desvelando además el secreto de quien se escondía bajo ese seudónimo del que ya a veces habíamos elucubrado quien o quienes podrían esconderse tras él. Desvelado el misterio de la autoría, como aquí lo que importa es el Qué y no tanto el Quién, me centraré en la novela.

La bestia se anuncia como un thriller histórico, algo que genera mucho interés. Y no falla creando una trama ambientada en el Madrid de 1834 en el que la ciudad recibía cada vez mas ciudadanos venidos de extramuros huyendo de los enfrentamientos entre carlistas e isabelinos, a la que se suman una epidemia de cólera que sumirá a la ciudad en un caos de pobreza y desigualdades y en los que ni los gobernantes ni la policía tienen como objetivo prioritario investigar que está ocurriendo con unas niñas que desaparecen y luego son encontradas salvajemente desmembradas.

Un asunto en el que pronto asomarán, junto a una bestia que parece la causante de las desapariciones, anillos que sirven de contraseña, ritos ancestrales y sociedades secretas junto a burgueses y clérigos con intereses partidistas en el que será la pequeña Clara, protagonista indiscutible, la que tendrá que poner todo su empeño, aprendiendo a base de golpes y rodeada de un variopinto grupo de secundarios, en averiguar que está ocurriendo en ese Madrid caótico y miserable y encontrar el paradero de su hermana, que es lo más importante y único que le queda.

Los autores han logrado crear un ambiente sórdido y sucio, de pobreza y desgaste humano a la par que describen un escenario en el que Madrid ya estaba siendo asfixiado por sus murallas, creando una atmósfera de contrastes entre las clases sociales de una ciudad que luchaba con varios frentes abiertos: la política, la sanidad, la seguridad…

A medida que avanza la trama se sucede un intercambio, obligado por los giros, de los personajes secundarios, creando así una especie de relevo en las pesquisas mientras el hilo conductor siempre será la pequeña Clara y la búsqueda incansable de su hermana. Así que mejor no encariñarse con ninguno, a pesar de que alguno parecía haber llegado para quedarse.

La Bestia comienza con un capítulo muy fuerte que ya da una idea de todo lo que está por leer, aunque es cierto que en la mitad del libro la trama se vuelve un poco más lenta con algunas situaciones demasiado recreadas tal vez, para volver a coger un ritmo que nos llevará a un final que, aunque un poco previsible y con algunas cosas un tanto poco creíbles, pero perdonables cuando de ficción se trata, acabará de manera correcta.

La novela mantiene un nivel narrativo adecuado, que se refleja en una trama compleja y bien estructurada, y aunque conoceremos quien es el causante de los males con bastante prontitud, no por ello decae el interés por conocer cómo acabará todo. Cumple así, en mi opinión, con la tarea para la que fue escrito: entretener y hacer disfrutar a los lectores a la par que, como siempre en este tipo de novelas, dejará algunas denuncias de tipo social.
Enlace: https://www.sirmactres.com/2..