Vaya, vaya, he leído dos libros al mismo tiempo: Juan J. Millás y los hermanos Grimm. Y encima la versión fantasmal de éstos. Mi primer libro de Millás, que me sorprendió entrando en sueños a varios cuentos infantiles, hilándolos con el odio a un padre desamorado, la sorpresa de una hermanastra que muere asesinada con un alfiler clavado en el cuerpo de una mariposa, un hombrecillo minúsculo que aparece emparedado, y que concede un solo deseo a quien lo descubre, si antes lo atiborra de comida y un final que llega muy rápido o muy despacito, según estemos en la vida real o en un cuento. Amigos lectores, esto es descabellado y . . . la imaginación del autor también. |