Circe

Circe, inmortal, como todos los que la rodean, vive rodeada de la vida de placer de los dioses, afrontando una vida eterna eternamente insatisfactoria.
Despreciada por su madre y hermanos, vive a la sombra de la indiferencia de su padre; la vida de Circe está marcada por la soledad, hasta que se tropieza con Glauco, un pescador del que, al ser por 1ª vez objeto de atención, se enamora.
Su amor por Glauco está destinado a morir con la vida mortal de éste, y es por ello que Circe le hace beber el jugo de unas flores, consideradas mágicas por haberse derramado sobre ellas la sangre de los inmortales en una de las batallas entre dioses y titanes.
La poción convierte a Glauco en un nuevo dios, atrás queda el pescador amigo de Circe, a la que pronto olvida para centrar su afecto entre las ninfas más hermosas que se disputan su amor.
Entre ellas, Escila, una ninfa tan hermosa como cruel, resulta ser la elegida por Glauco, motivo que impulsa a Circe a hacer uso, de nuevo, de las flores mágicas… y… es de esa manera en la que Escila pasa a convertirse en un terrible monstruo, con 6 cabezas y 12 patas, que huye a esconderse en el mar, un nuevo terror que acecha a cada barco que osa pasar por sus dominios.
Ésta nueva transformación obrada por Circe, debe tener consecuencias: semejante poder exige un castigo para evitar soliviantar los susceptibles ánimos del dios Zeus, la alianza entre dioses y titanes es frágil. El padre de Circe debe imponer un castigo.
Se ve entonces, desterrada a la isla de Eea, pero Circe aún no ha acabado, su historia no termina ahí.
Dioses, semidioses y mortales siguen apareciendo en su camino.
Un paseo por la mitología griega y una historia que es, en sí misma, apasionante.
La historia de Circe, tal y como está aquí contada, es una lucha por ser uno mismo, independientemente del destino marcado.
La hechicera Eea os espera para descubriros su apasionante vida. ¿Os quedaréis sin descubrirla?