Se ha convertido en uno de mis libros favoritos. Con una pluma ligera, llena de imaginación e ingenio, y unas descripciones detalladas, pero sin entrar en excentricidades, me he zambullido en una historia llena de dramas, conspiraciones y amores. Para mi, lo más importante, es la figura de Circe. Una mujer que se hace a sí misma, que odia su divinidad y ansía la fragilidad de los humanos. Se enfrenta a sus miedos, a su soledad y a la ira de los dioses, primero con recelo y luego resuelta y ágil de mente. No quería terminar el libro, me parece maravilloso. Trata la mitología desde un punto de vista nuevo, pero siempre manteniendo ese tono elocuente y lleno de florituras. |