Circe

La novela parte desde la infancia de nuestra protagonista. Vemos cómo la trata su familia por ser diferente y cómo, más tarde, su padre, el titán Helios, la destierra a la isla de Eea para toda la eternidad. ¿Por qué? Pues porque Circe tiene el don de la brujería y en un acto de ira comete un error fatal que desencadenará en ese castigo impuesto por su padre.

Si os gusta la mitología griega, las leyendas y todo lo que tenga que ver con los dioses, sin duda es un libro que tenéis que leer. En esta obra la autora nos acerca de la mano de Circe a figuras tan conocidas como el Minotauro, Medea, Dédalo, Atenea y Odiseo (entre otros), cuya aparición cobrará gran importancia en la vida de nuestra protagonista y hechicera.

El estilo narrativo de la autora me parece exquisito, como también la forma en la que nos cuenta esa parte de “La Odisea” de Homero manteniendo su esencia original pero añadiendo ciertos matices y tomándose algunas licencias para recrear la historia desde el punto de vista de Circe. Nos presenta no solo a la diosa y a la bruja, si no también a la mujer y a la madre, haciendo hincapié de forma brillante en cada una de estas facetas y ayudándose en ello para reflejar la evolución que tiene el personaje durante toda la novela.

En cuanto al final, fue toda una sorpresa. Aunque me imaginaba algunas de las cosas que podrían suceder, otras me pillaron totalmente desprevenida y, en lo personal, fueron todo un acierto. Teniendo así un broche final que a mi me dejó muy buen sabor de boca.