Circe

Desde pequeña he tenido fascinación por las culturas antiguas: Egipto, Grecia, Roma, aztecas, incas, mayas… pero la mitología griega ocupa un lugar especial en mi corazón. Me enfrenté a la lectura de “Circe” con respeto por las altas expectativas que tenía, pero me alegra decir, que ha estado a la altura. No voy a decir que sea una obra cumbre de la literatura, ni un imprescindible para todo el mundo, pero para mi tiene 5 estrellas por todo lo que me ha hecho sentir y por cómo la magia de la hechicera Circe me ha trasladado hasta la Grecia clásica.

“Circe” es una reinterpretación de la mitología griega, donde la autora da voz a la diosa Circe, hechicera de la isla de Eea. Un personaje que hasta ahora era principalmente conocido como una mujer malvada y cruel, apenas una pequeña aventura más dentro de las leyendas de los grandes héroes (especialmente conocido su pasaje en la Odisea). Madeline Miller nos permite acompañar a Circe donde siglos y siglos de su eterna vida divina poniendo el foco en su dimensión más humana. Es decir, un relato intimista y a ratos cotidiano, centrado en sus sentimientos, miedos y encrucijadas. Desde pequeña Circe no encaja en su familia, todos ellos dioses, titanes, ninfas, nereidas, náyades… y sufre por ello. Además, pronto acabará exiliada en la isla de Eea y, donde año tras año, ira conociéndose a si misma, sus poderes y todo lo que es capaz de hacer. Veremos como suceden todos los horrores que se achacan a la diosa, pero esta vez desde su punto de vista. ¿Es tan despiadada como nos lo han contado?

Me ha gustado mucho el homenaje que hace de la vida tranquila, donde no son necesarios las frugalidades y lujos de la vida de los dioses, sino el sentirse realizado y estar en buena compañía. En relación con eso, encontramos otro de los temas clave de la obra, la soledad. Una soledad que empodera a ratos pero que también duele. Circe es una mujer poderosa y hecha a sí misma y que nos enseña las importancia de vivir libres y fieles a uno mismo, sin caer en las presiones sociales que nos harían infelices.

Los amantes de la mitología griega seguro esbozarán una sonrisa al encontrarse con personajes conocidos como Dédalo y su hijo Ícaro, Ariadna y el minotauro, Odiseo y Penélope, dioses olímpicos como Atenea y Hermes entre muchos otros… No obstante, creo que es una lectura que también puede ser disfrutada si no conoces mucho de las leyendas clásicas. Eso sí, no debéis esperar una aventura épica sino más bien, una narración intensa pero pausada y llena de preciosas descripciones.

De hecho, tiene geniales guiños críticos a los mitos como satirizar acerca de como los héroes siempre utilizan las mismas fórmulas para sus victorias o poniendo en entredicho ese papel tan secundario de la mujer que, con excepción de las diosas olímpicas, se reduce a crueles, esposas fieles o amantes de usar y tirar siempre a merced de las decisiones de los hombres.

Para mi, una joya