Cinder: Las crónicas lunares, 1

En esta historia se nos presenta la Tierra 126 años después de la IV Guerra Mundial. Después de ésta, la Tierra se dividió en varios países. Nos encontramos en la capital de la Comunidad Oriental, Nueva Pekín, en la que su emperador está muriendo debido a la Letumosis, una especie de peste negra de la que no hay cura.
Aquí conocemos a Cinder, una mecánica ciborg que no está muy contenta con su vida, algo normal, teniendo en cuenta que su madre adoptiva, además de ser muy mala persona, es su dueña, ya que los ciborgs y los androides no pueden ser libres.
Un día Cinder conoce a Kai, el heredero al trono y empieza una amistad entre ellos. A la vez Cinder descubre que hay algo especial en ella, algo que será muy importante para la historia.
Y luego tenemos a los lunares, los habitantes de la Luna, que tiene poderes para controlar la mente de las personas y están gobernados por Levana, una mala de cuento de manual.

Esta sería la sinopsis sin spoilers, y ahora toca mi opinión, que seguro que tiene alguno.

La historia me ha gustado más de lo que pensaba, a pesar de que vi el plot desde el principio. Creo que queda demasiado claro y que nadie se habrá sorprendido cuando lo revelan, pero eso no hace que la historia sea peor.
Cinder es genial, una protagonista distinta a las que hemos visto hasta ahora. La pobre lo pasa fatal con esa "familia" que le ha tocado, que la trata pero que a la Cenicienta original. Kai es un amor, da gusto encontrar personajes así en los libros juveniles.
Toda la trama de los lunares, su "magia", la enfermedad, los espías...la verdad es que es muy interesante y engancha bastante. ¡Y ese final! ¿Ahora qué pasará?
Lo único que quiero es que, por favor, acaben con Levana pronto porque es tan cruel que se me revuelve el estómago leyendo las cosas que hace.
Ojala todo acabe bien para Cinder, Kai y que vuelva Iko por favor!