Ha sido una lectura divertida, con escenas tan humorísticas que tenía que volver a leerlas porque me encantaban. Sin embargo, en las últimas páginas (hablo de las últimas 30) se me empezó a hacer un poco pesado, quizá por tratar el mismo tema siempre. A pesar de ello, es un libro entretenido, para pasar el tiempo si no sabéis qué leer.
|