Hombrecitos (Edición ilustrada)

Yo, que soy fan-fan-fan de Jo March y me conozco la historia de su familia al detalle, ..., encontrarme con esta continuación ha sido maravilloso.
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Jo Bhaer (adopta el nombre de su esposo) creó junto a él una escuela en Plumfield, la casa de la tia March que el dejó en herencia.
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La novela no tiene otra pretensión que hacer pasar un rato muy agradable a los lectores que se acerquen a ella.
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Con una docena de crios, incluidos los suyos y los sobrinos, empezamos conociendo a Dan, un niño que recoge nuestro querido Teddy (Lawrence) para que Jo lo ayude, ya que se ha quedado huerfano.
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Con apariciones estelares, como la del propio Teddy, nos asomamos a un "qué pasó depsués", para comprobar que, si bien Jo ya no escribe ni es novelista (algo que no entiendo), si que ha encontrado su sitio en el mundo. (algo es algo) y que es feliz.
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Sigue siendo la misma alocada que disfruta de la vida y esta acompañada de criaturas que la hacen crecer y ser mejor.
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Cada capitulo cuenta una historia de los niños y vamos creciendo con ellos.
Y me he sorprendido en muchas ocasiones leyendo comportamientos que Jo y su Fritz consienten a los niños y que son ahora muy normales pero que en su día, me da a mi que no lo eran: por ejemplo, el que niños y niñas estudien juntos, que jueguen a lo que quieran sin mirar lo que se supone que es para un genero u otro, igualdad de trato.
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Es verdad que Alcott era una rompedora, y aqui lo vuelve a demostrar.
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Una novela valiente, una lectura muy bonita con el espiritu de las Mujercitas
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