Aquellas mujercitas

-"AQUELLAS MUJERCITAS" de Louisa May Alcott-
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Como cada año por estas fechas, tengo una cita pendiente en casa de las hermanas March, pero en este año, a diferencia de los anteriores, he vuelto a su segunda parte, ya que es la que menos veces he leído, y con la que más me apetecía reencontrarme.
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Louisa May Alcott escribió su afamada obra, inspirándose en sus propias vivencias, y en su relación con sus hermanas, y en esta parte de la historia ya han pasado tres años desde la guerra, y cada una de las hermanas March, ha ido creciendo, madurando, y teniendo sus propias vivencias.
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"Mujercitas", la primera parte, fue una libro escrito por encargo, y que Louisa May Alcott en un primer momento rechazó, pero el adelanto económico que le ofrecieron fue tan importante, y su familia estaba tan arruinada, que lo aceptó, y lo escribió, en apenas ocho semanas, siendo publicado en 1968. Esta segunda parte, "Aquellas Mujercitas", se publicó al año siguiente.
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Creo que la atemporalidad de esta historia en su conjunto, está en que las vivencias de estas hermanas, son situaciones que podrían pasarnos a cualquiera de nosotras, más allá del tiempo y del espacio, y además es muy fácil sentirnos identificadas con alguna de sus personalidades, ya sea con la sensata y responsable Meg, o con la rebelde y aventurera Jo, con la tímida y dulce Beth, o con la caprichosa y ambiciosa Amy. Supongo que cada una de nosotras, tenemos un poco de cada una de ellas.
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He vuelto ha disfrutar enormemente de "Aquellas mujercitas", una lectura entrañable y acogedora, y que al igual que su predecesora, contiene mucho más de lo parece, pues profundiza en los convencionalismos sociales de la época, y nos transmite grandes valores sobre ser fiel a uno mismo, y encontrar la felicidad en las pequeñas cosas.