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En esta segunda parte de la trilogía nos encontramos con una trama repleta de acción, con multitud de personajes nuevos, y atrayentes, con más profundidad en las relaciones personales y con unos giros argumentales que hacen que no puedas, ni quieras, parar de leer. Que la autora escribe maravillosamente bien es algo que ya os he dicho muchas veces, no me canso de hacerlo, y aquí no se queda atrás. María ha creado un mundo oscuro con personajes perfectamente definidos, una trama muy bien hilada que en algún momento encaja a la perfección y con varias vueltas de tuerca que hacen que te explote la cabeza. Deseando ponerme con el tercer, y último, libro de la trilogía porque la cosa promete. |
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