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El titulo describe perfectamente a este libro y es que al ser relatos cortos y tan dinámicos, seguramente un viaje en bondi en hora pico te deje leer al menos la mitad de este libro (si es que vas sentado). Me gustó mucho este libro, me fascinó como el autor llega al lector, como las pequeñas frases y metáforas me causaron tanto al momento de leerlas. Tengo que admitir que no todos los relatos me encantaron, pero a muchos los amé, en especial los primeros tres y los culpo de mi exigencia con los siguientes. A los primeros los sentí super profundos, me identifique tanto que mientras los leía solo podía pensar en donde tatuarme todo esoooo Y no me mal entiendan todos los relatos tienen su profundidad pero ya no me llegaron tanto A MI y creo que en parte se debe a que al nombrar varias calles y lugares de la ciudad de BsAs, me sentí un poco ajena por no ser de ahí. Todas las historias son muy diferentes, así que pueden llegar de distintas formas, algunas son pequeñas historias, otras reflexiones; hay palabras del autor hablándote directamente y otras hablando a nadie en especifico; hay algunas casi poéticas y otras muy cómicas y esto es hermoso de leer. Unas de mis favoritas fueron: 🔌Cuando dejes de mirar Netflix 🔌Amor urbano (bonaerense y universal) 🔌Peregrinación por paro de subte 🔌Carta que encontraría un niño Finalmente quiero decir que el autor logró que, gracias a su libro, reflexionemos sobre el uso de las redes sociales y toda esta (des)conectividad actual y estoy segura de que era uno de sus objetivos. |
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