Una corte de niebla y furia

Una Corte de Niebla y Furia es la segunda parte de la saga Una Corte de Rosas y Espinas de la autora americana Sarah J. Maas. Si habéis leído la reseña del anterior libro, sabréis que no terminó de convencerme, pero fuisteis muchos los que me animasteis a continuar porque la historia mejoraba bastante. Pues bien, lo cierto es que me ha desilusionado muchísimo esta lectura, y es que le encuentro los mismos fallos que en el volumen anterior. En este segundo libro, y sin entrar en spoilers, se continúa la historia de Feyre, Tamlin y Rhysand; y nos encontramos ante un giro en la trama que en un principio promete mucha acción y aventuras, pero que se queda en el intento. Sé que para muchas personas esto se trata de una opinión impopular, pero también es una opinión personal, y como tal puede ser compartida o no.

Si bien el argumento de la historia parecía mejorar con el giro inesperado de la trama, la forma en la que la autora lo desarrolla resulta bastante aburrido y monótono. Abundan las descripciones y no existe acción hasta los últimos capítulos; la trama principal se ve reducida al romance entre dos de los protagonistas. En 586 páginas he tenido la impresión de que no pasaba absolutamente nada interesante. Además, la forma en la que la autora ha tratado a uno de los protagonistas principales no me ha parecido del todo correcta, ya que resultaba todo muy forzado y para mí realmente carecía de sentido. El final me ha sabido a poco. Todo se ha desarrollado muy rápido y de una forma muy extraña. Considero que el final del primer libro fue muchísimo mejor y más acertado.

En cuanto a los protagonistas, se observa un cambio bastante brusco en la personalidad de todos ellos. Ni el bueno es ya tan bueno, ni el malo tan malo. Lo más destacable es la incorporación de cuatro nuevos protagonistas que dan más vida a la historia: Mor, Amren, Cassian y Azriel. Cada uno de ellos con una personalidad distinta que enriquece el mundo que ha creado la autora. El contrapunto a esto es que la personalidad de Feyre también cambia de una forma muy brusca y que no me ha gustado en absoluto. Es cierto que se ha convertido en una mujer fuerte y autosufiente, pero tiene detalles que me han resultado muy feos con gente que se había portado muy bien con ella en el pasado. Una parte de mí no comparte los nuevos valores de la protagonista.

El wordlbuilding sigue siendo el punto fuerte de estos libros. La autora ha creado un mundo muy interesante y del que continuamente se van conociendo detalles, ciudades, gente, etc. La ambientación es maravillosa, y para mí es una lástima que la acción no la acompañe.

Por último, el estilo de la autora se mantiene con respecto al libro anterior. Me gusta bastante la forma de escribir que tiene, aunque a veces hay algunas frases muy complejas y difíciles de entender. Quizás esto tenga que ver más con la traducción del libro. Sarah es capaz de describir escenas eróticas con sensibilidad y buen gusto, sin caer en el estilo burdo y soez.

Está claro que sobre gustos no hay nada escrito y, tristemente, no creo que continúe leyendo esta saga. Me planto en este libro a pesar de que me gustaría seguir sabiendo más sobre el mundo de Prythian. Sin embargo, y como siempre, os animo a que si os llama la atención y creéis que os puede gustar, le deis una oportunidad, ya que el hecho de que a mi no me haya gustado, no implica que a vosotros tampoco.
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