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Si el libro anterior de esta saga hizo que mi corazón latiera como las alas de un pajarillo que acaba de empezar a volar, este me lo ha tenido en un puño casi casi desde el principio. Los momentos de tranquilidad y paz los atesoraba para que durasen lo máximo posible pero sabía que este iba a ser un libro en el que iba a sufrir por todos. Me ha encantado el que haya podido conocer a nuevos personajes maravillosos, que hayan tantísimos plot twist, sigo adorando el crecimiento de cada personaje, la lealtad unos con otros, la familia que son. La Corte Noche quiero que sea mi casa y poder ser amiga de esos seres maravillosos y beber en Velaris las botellas de lujo de Rhysand. En definitiva, este libro es sinónimo de valentía, sacrificio, lealtad, fuerza, confianza y dolor. |
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