 |
En el parque ecológico de Plaiaundi, en Irún (Guipuzcoa), ha aparecido el cuerpo decapitado de una joven. La cabeza no aparece por ningún lado y las yemas de sus dedos han sido borradas con ácido por lo que la identificación es imposible. El examen forense tan sólo consigue atestiguar que era una mujer joven y caucásica y que fue estrangulada. Será el equipo de la comisaría de Oiartzun el que se hará cargo de la investigación; entre ellos, por supuesto, la agente Eider Chassereau y el suboficial Jon Ander Macua. Como en las demás entregas de la serie, Noelia consigue escribir una trama sin fisuras, muy bien desarrollada y con un remate perfecto. Y lo hace sin aspavientos, mostrando una investigación clásica en la que los dos ertzainas protagonistas se dedican a interrogar a unos y a otros, a bucear en archivos y, por qué no, hacer caso de su intuición y, en el caso de Eider, de los conocimientos que su carrera de Psicología le aporta. Una novela policíaca de estilo clásico en la que, como suele ocurrir actualmente en la literatura de este género, se le da mucha importancia al aspecto personal. Y, así, no sólo vamos a conocer la investigación policial, sino que también asistiremos al desarrollo de la vida de los personajes. Unos personajes que, los que seguimos la serie, ya conocemos y apreciamos. A los que hemos visto evolucionar, a los que la vida ha vapuleado y que se han ganado nuestro aprecio. Personalmente, la pareja formada por Eider y Jon Ander me encanta; es de mis preferidas dentro de las series que sigo. Y creo que la razón es lo real que veo a ambos. Les pasan cosas como al común de los mortales y tienen una vida parecida a la que podamos tener cualquier de nosotros. Actúan como creo que actuarán la mayoría de los policías. Y, teniendo en cuenta que no me separan demasiados kilómetros de la comisaría de la ertzantza en la que trabajan, no me extrañaría encontrármelos algún día jejeje. En este caso, el factor personal va a tener mucha importancia, especialmente por la parte de Eider. Pero mucha, mucha; os aseguro que os depara algunas sorpresas. Por la importancia que la parte personal tiene en esta serie, aconsejo, si se puede, leerla en orden. Creo que se disfruta mucho más. Si no es posible, si decidís empezar por esta novela, podéis hacerlo. La historia criminal empieza y termina en cada novela (sí que es cierto que en ésta hay alguna referencia a la investigación anterior pero bueno, no pasa nada si no sabéis a qué se refieren) y, respecto a la parte personal, la autora da pequeños apuntes para que el lector novato se pueda situar. Así que posible es pero, lo dicho, mejor ir por orden. Sí que es verdad que son ya cuatro novelas y que puede dar pereza empezar por la primera pero es una serie que merece mucho la pena y que estoy segura puede gustar a cualquier aficionado al género. Como siempre, los escenarios están muy conseguidos. Para mí es un punto conocer algunos de ellos, como Plaiaundi (un lugar muy bonito y no demasiado conocido, ni siquiera para los de aquí). No conozco, sin embargo, la urbanización vizcaína de lujo situada en Fuerte de Punta Galea pero las descripciones de la autora me han hecho trasladarme allí. La historia transcurre con ritmo. La autora combina la narración y el diálogo de forma adecuada y las páginas pasan volando. Se lee sin esfuerzo y con mucho interés. La intriga va in crescendo y al final ya no puedes parar de leer. Es un narrador omnisciente quien nos cuenta la historia y lo hará desde tres puntos de vista: la investigación policial, la familia Careaga y un hombre que se hacía llamar César. A pesar de los pocos personajes que pueblan la novela, Noelia consigue crear la duda en el lector y sorprenderle. Conclusión final ¿No conocéis aún esta serie? Si sois aficionados a la novela policíaca, no os la podéis perder. Noelia ha creado unos personajes creíbles, unas historias intrigantes y “enganchantes” en unos escenarios preciosos. Mucho esperaba de “La estrella de quince puntas” y no me ha defraudado. Enlace: https://librosquehayqueleer-.. |
>
