La vida que nos separa

Mariana es una mujer perteneciente a la clase media-alta de la Barcelona de los años 60/70. Criada en una familia tradicional y católica, con sólo quince años cree haber encontrado a su gran amor, pero la vida la llevará por otros derroteros y terminará casándose con Sergio, un hombre apuesto y ambicioso que hará cualquier cosa por estar en lo más alto de la pirámide social. Mariana siempre creyó que el matrimonio y los hijos la llevarían directamente a la felicidad y estabilidad; enseguida se dará cuenta que ella, y solo ella, debe coger el timón de su destino para poder llegar a buen puerto.

Una novela que te sitúa de manera magistral en la España de finales del franquismo y principios de la ansiada democracia, con una protagonista que, he de reconocer, en algunos momentos me sacaba de quicio por las decisiones que tomaba, llevada por su educación católica y tradicional, pero que en un momento dado logra quitarse la venda y desechar todos esos prejuicios que la sociedad de entonces, y gran parte de la de ahora, poseía: una mujer JAMÁS será el adorno ni el títere de nadie por mucho que intenten silenciarnos. Como decía mi abuela: "Mi madre no parió una esclava".

Es la primera vez que leo al autor, pero no va a ser la última, tengo varias de sus novelas y no tardaré en sumergirme en ellas, ya que su pluma me ha encantado. Aunque la narración es pausada consigue que seas incapaz de no engancharte a la trama y a la atmósfera de sus personajes.