Viuda, al fin

Está escrito en clave de humor, y hará que sueltes más de una carcajada. Lindgren emplea un estilo ágil y un lenguaje muy coloquial que le viene como anillo al dedo. Ulla es malhablada, pero no desagradable; utiliza tacos continuamente para quejarse de los obstáculos que le surgen en su nueva aventura, y el lector llega a ponerse en su piel. Ahora bien: que el texto sea de carácter cómico no significa que sea una lectura vacía; todo lo contrario. Se tratan temas como la vejez, la muerte, las relaciones familiares, la soledad, el amor… pero todo de una forma tan amena que en ningún momento resulta denso.
En resumen, no es un libro que pasará a la historia, pero sí una lectura muy amena y divertida que trata temas de los que debería hablarse más, y desde luego es de esos libros que te bebes sin darte cuenta. Recomendable si quieres echar un buen rato con una lectura diferente.