En este romance los mundos totalmente opuestos de Dylan y Theo se entrelazan de la forma más dulce posible. Dylan es un joven asiático de orígenes humildes que trabaja en el restaurante familiar. Theo es un chico de familia adinerada que tiene todo lo que puede desear, excepto el amor de su padre. Los mundos de ambos chocarán por caprichos del destino. Desde ese momento se verán envueltos en una falsa relación que, a pesar de tener sus altibajos, se desarrolla de una manera preciosa. Es una historia con una trama bastante sencilla, sin grandes dramas y con bastantes clichés, es todo lo que piensas que va a ser, sin embargo es tan ligera y tierna que consigue sacarte una sonrisa. En ese sentido me ha recordado un poco a Heartstopper. He disfrutado mucho conociendo a los personajes y aprendiendo sobre la cultura china, aunque es verdad que me ha faltado un poquito de profundidad. Aun así, me parece una historia perfecta si buscáis un romance ligero, boys-love súper cozy, y ya si sois fans del trope fake dating necesitáis añadirla a vuestro TBR. 3,75/5 + Leer más |