El secreto de la casa del río

Es una novela marcada por la sencillez y la hermosa armonia con la que escribe Sarah Lark. No es mi género, pero Sarah Lark me cautivó hace mucho tiempo con "En el país de la nube blanca". Desde entonces adoro este tipo de novelas que escribe.

Los personajes son un plato fuerte. Ellionor, descubre un secreto familiar y decide viajar a Nueva Zelanda para descubrir el pasado de su familia. Viaja con su marido Gernot (al que odiado, por cierto, aunque a veces también a ella). Allí conocerá a parte de sus parientes, cómo Rebeca, Alison, Clara, Moises,... Los personajes femeninos son los protagonistas. Nos podemos encontrar mujeres fuertes y valientes, con recursos y autónomas y su antonomasia: mujeres frágiles y supeditadas por el sexo masculino. Ellionor, es un personaje de esos extraños que a veces amas y a veces te dan ganas de decirle, "eh, pero que leches haces?".

La novela trascurre en distintas épocas. Para mí han sido tres grandes bloques, con subtramas (Liliana, Clara, Alison y Tricia) muy bien enlazadas para llevarnos al final. Los capítulos alternan la búsqueda que hace la protagonista con los diarios y las cartas que se encuentran. Pese al tamaño, es muy ligera de leer y ágil, te las vas comiendo, porque te atrapan los secretos y el saber que sucederá.
Me encanta la parte histórica, ya que la autora describe muy bien cómo era vivir 1900, el papel que representaba la mujer, detalles de la sociedad y su evolución, los acontecimientos importantes,... No es sólo una novela romántica. Es más, yo esta, en mi opinión, la marcaría cómo histórica con leves matices románticos.

Ambientada, mayoritariamente, en Nueva Zelanda. Las descripciones del país son muy buenas, hace que te envuelva un halo de esa aire húmedo, kiwis y kauris, vegetación, playas preciosas, reconozco que mis ganas de ir a ese país se iniciaron con estas novelas.

Es autoconclusivo, no hay necesidad de leer libros anteriores a este para entender la historia.

Increíble lectura que recomiendo, sobretodo también si quieres salir de una lectura muy espesa. Con estas te dejas llevar.