Esther Vaughan desaparece de su apartamento de Chicago sin dejar rastro. Su compañera de piso encuentra una carta que le hace plantearse si realmente conoce a Esther. Me ha defraudado un poco este libro porque había oído maravillas de la autora. A mi parecer es un libro lento, en el que no pasa nada hasta que quedan 30 páginas para el final, con una protagonista que no hace más que ensalzar a su compañera de piso y con un final previsible y que deja muchas preguntas sin responer. |