Ayer es una obra breve pero cargada de intensidad. Esa intensidad que Agota es especialista en recrear a través de frases cortas, directas, abruptas y llenas de emoción. En este libro podemos observar como muchas descripciones del personaje principal tienen un paralelismo con la vida real de la autora. El protagonista como Agota, es un refugiado, que escribe en una lengua que no es la propia y trabaja en una fábrica de relojes. Los personajes y la atmósfera que recrea es gris, repleta de desesperanza y tristeza. Lejos de hacer spoiler, cabe mencionar que se habla de infancias rotas, desarraigo, suelos frustrados, soledad... Pero lo hace con una prosa tan poética, que la vuelve totalmente adictiva. Todo lo que he leído de ella me ha maravillado, así que merece la pena acercarse a su obra sin duda alguna. |