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Este libro nos presenta un mundo dividido en dos: Mindscape (el mundo de los seres fantásticos) y el mundo natural donde residen los humanos pero que están conectados entre sí. Luella me ha parecido una protagonista atrevida, inteligente y que tiene magia sobre la naturaleza (lo que hace que se asemeje al mito de Hades y Perséfone); contrastando con Eldas, un personaje más frío y oscuro. Siento precisamente que esto es lo que ha hecho que el romance que se da entre ambos no lo haya llegado a vivir y a creérmelo del todo. Al principio es planteado como un enemies to lovers pero bajo mi punto de vista no he tenido esa sensación. En pocas palabras: Su romance es muy flojo y en ocasiones un tanto forzoso cuando se pudo haber planteado diálogos más convincentes aprovechando que pertenece al género de fantasía. Por último, faltaría hablar de la trama que envuelve la historia; algo que a pesar de entender no me haya convencido del todo: y es que al ser una historia autoconclusiva, sentí que me ha faltado por desarrollar puntos del libro donde podrían haber añadido más carne o chicha. Me han faltado momentos de acción, de auténtica comprensión entre los protagonistas y que el romance tenía que haber sido mejor planteado dado que es un trato donde ambos tienen que ayudarse para sobrevivir a una maldición que abarca la estabilidad tanto del mundo natural como de Mindscape. Tristemente no he sentido que se me haya encogido el corazón por ninguna escena, ni siquiera tensión por lo que les sucede a los personajes. Este libro lo recomendaría a aquellos que no estén acostumbrados a leer fantasía; ya que hay puntos que no desarrollan y que me habría gustado que lo hicieran y me dejaron con ganas de más. No obstante, a pesar de los puntos negativos, no ha sido difícil imaginarme cómo fue el mundo en el cual Elise Kova quiso que nos introdujéramos. |
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