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Está narrada en tercera persona centrándose por completo en el personaje principal, impidiendo conocer la perspectiva del resto de personajes. Y aquí recae el punto fuerte de la novela, pues acompañamos al protagonista en cada uno de sus pasos, entendiendo su comportamiento, sus emociones y sus decisiones. Nos desintegramos, evolucionamos y crecemos junto a él. Una trama muy elaborada, con cada uno de los detalles muy bien construidos. Se centra en un venganza, una historia de desesperación, angustia y supervivencia. Al principio te sitúas rápidamente en la historia, hay tensión e intriga. Conforme avanza la novela, se va volviendo más compleja, aumentando los momentos de acción y la profundidad en la que se conoce al protagonista. Hay pocos diálogos, por lo que el ritmo en ocasiones es lento, incluso hay partes demasiado densas o repetitivas, aunque con algún giro inesperado que te atrapa. En definitiva, es un poderoso thriller psicológico. El autor consigue que sientas lo mismo que el protagonista. He sentido miedo, frustración y angustia, estando en alerta toda la lectura. |
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