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El pergamino del Dragón no debe ser llamado. Por un lado tenemos a Yumeko, una yokai kitsune medio humana. Lleva toda la vida viviendo con los monjes y no sabe lo que es la verdadera libertad. Por otro lado tenemos a Kage Tatsumi, un shinobi elegido para portar el poder de una espada maldita y por ello nombrado asesino de demonios. El camino de ambos se cruza y se unirán para que Yumeko pueda llegar a su siguiente destino. Se verán envueltos en peleas y conocerán nuevos personajes en su trayecto. ¿Podrán llevar a cabo sus respectivas misiones? Este libro está narrado desde el punto de vista de los dos protagonistas principalmente, ya que hay algunos contados desde otro punto de vista. Me ha gustado cómo está narrado y los personajes están bien pero se me ha hecho bastante juvenil. Aún así no dejé de sentirme como si estuviese viendo un anime porque hay mucha acción y un montón de seres de la mitología japonesa que fue lo que más me gustó. El worldbuding me pareció sin más y, sinceramente no le presté demasiada atención. Era como si la historia me pidiese centrarme en la acción básicamente. Está lleno de términos relativos al tema y la época pero se van explicando al final de los capítulos y, además, tiene un glosario al final del libro. No descarto continuar con la segunda parte porque, aunque no me haya entusiasmado, me ha parecido interesante y me intriga cómo puede seguir. |
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