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Al principio me costó un poco engancharme a la lectura de esta trama similar a la película “Dos vidas en un instante” por su narrativa excesivamente simple, pero Hannah, su cercanía y la decisión que la divide en dos mundos paralelos terminaron conquistándome por completo. He devorado el libro en menos de 24 horas. Amena, entretenida y, aunque predecible, tiene un toque intrigante, porque no sabes cómo va a terminar, si los dos mundos se van a unir, si va a tener dos finales alternativos... Ahí está la gracia de la novela, que estás haciéndote preguntas continuamente. ¿Cómo terminará? ¿Con quién terminará Hannah? Te hace pensar. ¿Qué mundo alternativo te gusta más para Hannah? ¿Cómo sería tu otro “yo” si hubieras tomado otra/s decisión/es? Hannah vuelve a Los Ángeles. La división de mundos alternativos da comienzo cuando una versión decide quedarse con Ethan a pasar la noche y la otra se va con Gaby (mejor amiga) y Mark (marido de la mejor amiga) a casa. A partir de ahí, sin que en ningún momento haya confusión ni pierdas el hilo de una historia a la otra, al menos a mí no me ha pasado, los acontecimientos se van sucediendo de manera distinta y, al mismo tiempo, ambos mundos tienen similitudes, aunque no sea a través del mismo “método”, por decirlo de algún modo. La recomiendo mucho. A simple vista es sencilla y, como digo, el nivel narrativo es de lo más simple, pero es una trama interesante para pasar un buen rato y desconectar de lecturas más densas. |
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