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A lo largo de las poco más de 400 páginas tuve momentos de amor y de odio a partes iguales hacia la historia. Los protagonistas, Abby y Travis, comienzan el libro con personalidades muy bien definidas, que se van desfigurando a lo largo de el. El principal problema que le veo a este libro es que, quitando el principio, no sabes que pensar de los personajes, se pasan toda la historia dando vueltas y vueltas, pensando una cosa y al momento siguiente otra totalmente diferente, lo que provoca que por lo menos en mi caso, no pudiera conectar con ellos, ya que no entendía en muchas circunstancias que es lo que pensaban para actuar así. Sobre todo, me costaba entender la forma de tratarse entre ellos, ya que no se tenían ningún tipo de respeto y aun así, lo trataban como si fuera totalmente normal. Además de esto, hay bastantes situaciones que parece que estén de relleno, incluso por momentos puedes sentir que lo que estás leyendo lo leíste ya un par de páginas antes. |
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