EL PEQUEÑO BAKU, 2

Segundo y último volumen de esta curiosa e interesante miniserie sobre la inmigración en Japón.

Baku había llegado a Tokio en busca de un lugar mejor, al igual que otros tantos inmigrantes con los que se va encontrando a lo largo de las páginas de este cómic. Su vida en la ciudad ya está algo más asentada gracias a que encontró casa y trabajo, pero no por ello está exento de ser tratado como algo ajeno a la sociedad japonesa, que es lo que le pasa cuando la tía de la arrendadora le conoce, o al encontrarse con la incomprensión de los que no entienden su reacciones frente las cosas que le suceden.

Con la crisis llega también el cierre del restaurante donde trabaja, así que tendrá que buscarse otro trabajo. Primero se dedica al negocio del paisajismo gracias a un personaje que parece bastante mafiosillo (por su suerte no se aprovecha de Baku, incluso sorprende su mentalidad abierta con respecto a la inmigración). Cuando la cantidad de trabajo se reduce, Baku se busca trabajo de teleasistente en una empresa en la que necesitan asistencia en varios idiomas porque trabajan también para otros planetas. Él tiene la suerte de hablar bakuniano y japonés, pero se puede ver el desprecio con el que alguno de los compañeros habla de otro que no tiene suficiente nivel como para atender llamadas en japonés.

Llega el aniversario de Baku en la ciudad y es momento de reflexionar sobre ese periodo de tiempo viviendo allí. Tras muchos bandazos laborales, ha decidido estudiar para poder ser traductor y ayudar a la gente de otros países que quiera vivir allí, con la experiencia que tiene también de su propio caso. En todo este tiempo además ha podido conocer a mucha otra gente, ya sean japoneses o inmigrantes de muy diferentes países, y todos ellos en su conjunto conforman la red de Baku y hacen que su vida en un lugar diferente sea más agradable y sencilla.

A pesar de ser un manga bastante soft sobre la inmigración, no por ello pierde relevancia el mensaje que quiere transmitir. Además toca hueso con muchas de las vivencias casuales de sus personajes, la falta de comprensión y brecha sociocultural con la que los inmigrantes tienen que lidiar a menudo. Un manga necesario.