No fue un suicidio si aún estás aquí: 1

Por miedo al rechazo, por pavor al que dirán. Simplemente por vivir en aquel mundo en el que la masculinidad se media por la cantidad de mujeres que habían pasado por tu cama.

Estas tan grabada a fuego en mi, que la sola idea de hacer desaparecer tu aroma de ni piel me produce el más terrible de los dolores.

Los años nos recuerdan cuan bajo podemos caer. Cómo podemos ser capaces de arruinarlo todo a nuestro paso. Pero también nos enseñan que todo tiene arreglo. Hasta la más vil de las crueldades.

Luces de neón que alumbran el camino, sueños ocultos tras cada fuego artificial. Todo lo que ansias podrá ser tuyo, en el momento que aprendas que vales más de lo que crees.

Oscuro del alma, oscuro el corazón. Sueños rotos en la noche wue amortiguan el dolor de una vida equivocada.

Dejar de luchar no te hace más débil. Te convierte en alguien que se aparta del camino.

Si por cada sonrisa que ella expresara, una parte de mi alma se desgarrara, para mí sería suficiente. Sería capaz de mitigar mi dolor si ella hubiera sido feliz. Pero no fuiste capaz de algo tan básico. No supiste alzarla como la diosa que era, sino que la transformase en un ángel caído, con las alas rotas y el corazón reducido a cenizas.

Porque los lobos con piel de cordero dan mucho más miedo que los lobos con sus fauces abiertas dispuestas a devorarte. Y es que lo más triste de todo eso, es que no los ves venir.