Un instante para ser nosotros

Una novela con una pareja protagonista muy singular, la formada por Olivia y Alan, marcada por la diferencia de edad (doce años), por sus vivencias del pasado y sus esperanzas de futuro.

Olivia es una joven que en su momento tuvo que renunciar a su sueño de ir a la universidad para hacerse cargo del negocio familiar a la muerte de su padre. Tres años después, consigue cumplir ese sueño al iniciar sus estudios. Justo en ese momento es cuando conoce a Alan y lo que será su primera relación. Alan es un escritor que trabaja en la universidad, traumatizado por una dolorosa ruptura sentimental tiempo atrás, se enamora de Olivia desde el primer instante y ve en ella una nueva oportunidad para ser feliz. Olivia, en cambio, a pesar de que también siente algo muy profundo por él se muestra insegura, tiene miedo de que esa relación afecte a sus planes de futuro, no solo a los de ella sino también a los de Alan. Y la diferencia de edad también es un factor importante entre ellos: Alan ya ha consolidado su carrera, Olivia todavía tiene que definir su futuro y ese pasa por la universidad.

De esta forma, Alan tiene totalmente claro que quiere seguir con la relación, pero Olivia está llena de miedos e inseguridades, tiene que superar todas esas barreras mentales que la atenazan y mientras tanto Alan se muestras paciente; su amor por Olivia es tan intenso que incluso le hará plantearse si lo mejor no será dejarla marchar para que encuentre su camino.

Y entre los personajes, no hay que olvidarse de Ella, la mejor amiga de Olivia, que la trata de ayudar y aconsejar en todo momento, y de Flynt, compañero de piso de ambas, que son los que ponen la nota cómica a esta historia.

Ganadora del VII Premio Kiwi de Novela Romántica, Un instante para ser nosotros ha supuesto para mí una lectura distinta a lo que suelo leer habitualmente, una novela que me ha sorprendido, no por la historia que cuenta, sino por la forma en que la cuenta. Mediante una prosa, que es casi poesía, la autora presenta una historia de amor intensa, y mediante el empleo de la primera persona, profundiza en los sentimientos de los personajes, los cuales muestra a dos voces, intercalando por un lado, los pensamientos de Olivia, y por otro los de Alan.

Un instante para ser nosotros, un instante para que dos personas se encuentren, para que superen todos los obstáculos que las separan y los miedos que no las dejan avanzar hacia un camino común. Un instante en el que todo se deja atrás. Un instante en el que, lo más importante ya no es el yo, sino el nosotros.
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