El ladrón de rostros

3️⃣ Tercera parte de la saga. La historia comienza en mayo de 2021, durante la época de pandemia y restricciones, con una Ane Cestero aburrida de vigilar que la gente no se salte la normativa. Todo cambia con una llamada que la hace trasladarse a la cueva de Sandaili donde encuentran el cadáver de Arantza, cruelmente asesinada mientras practicaba un rito de fertilidad. Este no será el único asesinato e irán apareciendo nuevos casos que hacen llegar a pensar en una conexión con los catorce Apóstoles de la fachada del Santuario de Arantzazu.
Ibon Martín rescata a los personajes de los anteriores libros y vuelve a dar protagonismo a Madrazo, Aitor y Julia. Cada uno con sus historias pero conviviendo y trabajando juntos para encontrar a contrarreloj al asesino que anda suelto. Las nuevas incorporaciones son gente relacionada con los asesinatos y algunos caen mejor que otros.

🏞 Esta novela, se vale mucho de la tradición vasca y las creencias o leyendas que hay detrás son magníficas. La ambientación, con un paisaje tan verde y puntos tan bellos de Euskadi, hace que viajes a esos lugares: Oñati, Arantzazu, Araoz, …ahora, estoy deseando viajar de verdad y pasear por los parajes que esconde esta historia.
Capítulos cortos que te mantienen con la intriga, y que a veces dejan paso a una línea temporal con una historia en primera persona que explica un suceso del pasado que es clave para la resolución del caso.
🔚 El desenlace, como todos los finales de Ibon, todos podían ser culpables y al final alguno tenía que ser. Lo bueno es que no sale nadie de repente que no estuviera antes y es un final coherente. Lo que sí, deja ya el inicio del próximo libro preparado con un misterio final que habrá que descubrir próximamente.