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Si una palabra puede caracterizar a esta lectura es desgarradora. Una novela que os destrozará el corazón a dentelladas. Una dura historia de sufrimiento y dolor, que os pondrá a prueba desatando toda vuestra impotencia. Y es que Mil soles espléndidos es una ficción literaria, pero es historia, de unos hechos que han acontecido en el último cuarto del siglo XX, pero también actual, porque desgraciadamente Afganistán y sus mujeres han hecho como la pescadilla que se muerde la cola y han regresado, con la vuelta del régimen talibán, al terror del sometimiento, la falta de libertad, y la más dura violencia contra la mujer. Mil soles espléndidos narra la historia de Mariam que vendida en matrimonio por su propio padre, ha de convivir con un esposo que la desprecia y la maltrata, su vida carecerá de sentido hasta que Laila se cruce en su camino. Juntas, a través de su naciente amistad, pondrán algo de luz a su oscura existencia. Una preciosa historia de amistad y de amor. Un canto a la sororidad y al hermanamiento femenino, frente al horror del patriarcado. Novela muy recomendable, pero donde es necesario tomar aire y ser consciente de que es una lectura de una dureza brutal. Un libro para conocer y comprender, con una sutil base histórica que más que aleccionar nos lanza una caña de inquietud cultural que nos hace querer saber más de los hechos históricos y políticos acontecidos en esos años: la invasión de Rusia, la revolución social, la llegada de los talibanes... Sólo le achaco el final, no me ha encajado con el resto de la novela, señor Hosseini, no. Hablando del autor, es médico, e inicialmente se introdujo en el mundo de la literatura para poder subvencionar su ONG y dar a conocer su país natal y la grave situación que atraviesa, quizá en esto se refleje la sencillez del lenguaje y su estilo narrativo, aunque llegado el punto se pueda incluso agradecer una lectura ágil y sin complicaciones frente al atroz panorama que nos está contando. Como curiosidad comentar que el título hace referencia a un poema agfano del siglo XVII, donde menta a Kabul como la ciudad de los Mil soles espléndidos. Un título hermoso, sereno y bello para una novela cargada de horror. |
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