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Colleen Hoover es una autora bastante reconocida por sus novelas de romance. Siendo que esta novela se sale completamente de su género, decidí leerla a ver qué tal se desenvuelve en otro registro. Debo decir que llevaba una idea preconcebida de lo que sería la historia. Lo que encontré no me disgustó, pero como digo, no era la historia que imaginaba después de leer la sinopsis. Verity, una autora mundialmente conocida por escribir novelas de suspense ha tenido un accidente que la ha dejado con grandes secuelas. En su contrato aún quedan 3 novelas por publicar de su serie, por lo que su marido Jeremy y su agente deciden buscar una autora que le dé fin a la serie de novelas. Esa será Lowen, una escritora con varios títulos publicados pero sin la fama de Verity. Cuando acepta y comienza a buscar los esquemas argumentales y las notas de Verity en su propia casa, Lowen encontrará un diario personal de Verity que la obsesionará hasta límites insospechados. Aquí vamos a tener una doble narración. El presente con Lowen en la casa de Verity para la investigación de las novelas y el diario de Verity que contará la historia desde un punto concreto pasando por todas las desgracias que le tocaron vivir a la familia. Mi problema han sido los personajes. Sus decisiones y comportamiento no me parecían correctas, tampoco lógicas, y en muchos puntos me han sacado un poco de mis casillas. La historia se me ha hecho un poco repetitiva, pero también reconozco que es un libro que se lee rápidísimo. Tiene buen ritmo, te mantiene con la intriga y quieres seguir leyendo aunque algunas cosas asqueen. El final quizá ha sido la parte que más me ha gustado, pero también es cierto que casi se veía venir. Para ser la primera incursión de la autora en otro género no le ha salido tan mal. Ojalá vuelva a repetirlo porque la siguiente seguro que sería mucho más potente. |
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