Este libro es tan adictivo y emocionante, que es difícil parar un segundo. Es el segundo libro de Collen Hoover que leo y es completamente diferente; un thriller muy bien llevado que te mantiene en suspenso e incluso te pone enferma en algunas partes. Es realmente espeluznante, el único pero que yo le pongo es un poco el final, no me lo creí, no sé, algo falto. |