En general me gustó. Tiene cierta intriga que cumplió con las expectativas de entretenerme. Lo que no me gustó: No me molestan las escenas de sexo (que tampoco son para tanto), pero sí la forma de hablar de ellas; no es ser remilgado, pero no considero necesario ese lenguaje soez en un libro que no tiene la consideración de erótico. Para mí lo único que consiguió con eso fue mostrar a una Verity insegura, que intentaba valerse del sexo para tener a su marido al lado. No me gustó el final, no me gustan los finales abiertos. Me parece una estrategia de los escritores para intentar gustar a todo el mundo, así cada cuál lo amolda a su gusto. |