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Este era un libro que esperba con muchas ganas y no ha decepcionado. Después de una época donde parece ser que los finales que te reconfortan escatiman y es un verdadero placer leer la conclusión de una saga que sé que voy a re-leer hasta el fin de los días. Jude está dispuesta a enfrentarse, ella sola, al resto del mundo si ella cree que tiene razón, y eso la convierte en uno de mis personajes femeninos favoritos ya que puedes ver esos dejes humanos que te hacen simpatizar con ella. Cardan sigue siento maravilloso, con sus momentos estelares y dejando ver lo poco que en realidad entiende a Jude, y aún así no puedes evitar contener la respiración en ciertas escenas. Desde que vi el "meme" ese de "fierce wife and proud husband" no he podido dejar de imaginármelos a ellos en esta tesitura. Sí que han habido algunas cosas que no me han acabado de convencer en este último tomo que no ha conseguido superar a su predecesor, ya que al principio he sentido que había escenas que se alargaban demasiado y tengo la sensación que el tercer acto de la novela ha sido demasiado rápido, dejando poco tiempo al desarrollo de la profecía que llevamos escuchando desde el primer libro y que al final te deja pensando "¿Y ya está?". Aun así, creo que Holly Black ata muy bien todos los cabos sueltos, y sin duda espero que decida volver a este mundo en un futuro. |
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