El jardín secreto

Que buen descubrimiento, la verdad.

Empecé este libro con la errónea idea de que era de fantasía y nada que ver. Eso fue lo que hizo que tardara algo más en entrar completamente en él.

Me parece alucinante que una persona nacida en el siglo XIX tuviera esos pensamientos y esas ideas tan modernas respecto a la psicología porque si algo define a este libro es la frase: Mens sana in corpore sano, el como, en muchas ocasiones, la depresión, los ataques de ansiedad, etc, hacen que el cuerpo enferme.

Otro punto que me ha encantado es como muestra la necesidad de que los niños reciban cariño, comprensión e, incluso, disciplina pero siempre con ese punto de entendimiento y amor.

El como los niños se apoyan mutuamente en esta historia ha sido también una parte muy especial de la lectura e, incluso, el como la naturaleza forma parte de esta recuperación, de este cambio.

Solo puedo añadir que es una historia tierna, bonita, que me hizo sonreír mientras la leía. Si algún día tengo un hijo seguro que se la leeré.