Secretos imperfectos

No hay nada mejor que un Palo Cortao Península de Lustau para saborear los requiebros finales de esta majestuosa obra primera de la serie Bergman.
Los personajes están perfilados, con sus luces y sus sombras, para generar, las filias y las fobias del lector, en muchos casos a partes iguales.
Que placer da sumergirse en una trama tan técnicamente depurada al más puro estilo de las mejores policiacas sutilmente aliñada con los sentimientos que despiertan los protagonistas.
Descubrir la trama es todo un ejercicio para el lector, hacer un buen cierre es toda una complicación, muy bien resuelta por estos, muy buenos escritores.
Encarecidamente recomendable, más pronto que tarde, me adentraré en su segunda propuesta.
Esta relación promete ser duradera.