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Continuación de Caballos lentos primer libro de la serie la Casa de Ciénaga, lugar que ya sabemos que es donde terminan los espías caídos en desgracia del servicio secreto británico. Dos agentes de la Casa de la Ciénaga, reciben el encargo de proteger a un oligarca ruso de visita en el país. al mismo tiempo, un antiguo espía y compañero de Jackson Lamb de la época de la Guerra Fría, es hallado muerto en los asientos traseros de un autobús en las afueras de Oxford. Volvemos a encontrarnos con una novela coral, con un ritmo mucho mejor que el primer libro gracias a que los miembros de este extravagante grupo ya son conocidos y a que la trama cuenta con una doble historia más ambiciosa que engancha poco a poco hasta un final que te deja con esta cara 🥴 Me sigue gustando el estilo del autor, sus diálogos brillantes, su ingenio y como no, su humor y sarcasmo que siempre parecen encajar de forma bastante natural en el contexto de la Casa de la Ciénaga. Aunque no tanto la manera de cargarse a sus personajes 🙄🙄 Sin embargo, a mí pesar, el autor sigue sin profundizar en Jackson Lamb, nos va dejando pinceladas, pero no son suficientes. Aún así, ya sabemos algunas cosas: Jackson Lamb, reina en la Casa de la Ciénaga, espía en los tiempos del "zoo de los espías", el Berlín de los años de plomo, es un jefe que se hace respetar y eso que son constantes sus faltas de educación y humillaciones hacia sus subordinados. Obeso, desaliñado y con las manos grasientas por la comida que engulle, es poco escrupuloso con su higiene personal y apariencia y tiene un carácter que suele tender al sarcasmo. Un personaje tan repelente y flatuliento, como brillante, pues al fin y al cabo, si has sido espía, lo eres para siempre. Pero, ¿cuál fue su historia antes de caer en desgracia? . |
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