Aquel último verano

Priscila vuelve al pueblo que la vio crecer para acudir a la boda de uno de sus hermanos después de vivir unos años en el extranjero. Nada más pisar tierra y sumergirse en el agua del Mediterráneo le vienen recuerdos de una persona que fue muy especial para ella a lo largo de su vida. ¿Pero esta persona seguirá siendo igual de especial en el presente?

Este libro es lo que parece, por lo menos lo que me pareció a mí tras ver la portada, una historia de amor durante un verano entre una chica y un chico. Pero este libro es mucho más que eso, también son momentos en familia, diversión, amistad y un amor que veremos crecer con el transcurso de los años.

La forma de escribir de la autora es sencilla y eso hace que desde los primeros capítulos te enganches al libro. Yo os recomiendo leer el libro en verano en la playa o en algún lugar que os guste visitar durante esta época del año. Es un libro perfecto para leer cuando estas agobiada porque tengas poco tiempo o durante un parón lector.

Con los personajes no he llegado a empatizar del todo, pero sí que deseo conocerlos durante el resto de la saga. Porque esto si no lo sabías es el principio de una saga de cinco novelas y una historia corta. Con la historia me ha pasado algo parecido, había situaciones que no me llegaban a convencer o creérmelas del todo.

A pesar de que la romántica no es el género literario que más leo o más me guste, he disfrutado de este libro y se me ha hecho corta su lectura. Es un libro que quieres continuar leyendo desde que empiezas a conocer a los personajes y te metes en la historia y por supuesto, querrás conocer a los demás miembros de la familia Cabana.