Lejos del mundanal ruido

Lejos del mundanal ruido, primer gran éxito de Thomas Hardy, tiene en su receta todos los ingredientes que caracterizan a este novelista inglés. Historia ubicada en la campiña inglesa, donde el autor nos traslada sensorialmente a un ambiente campestre y rural, donde la naturaleza y el entorno se convierten en un personaje más y donde destaca la maravillosa forma de narrar del autor y sus descripciones llenas de lirismo.

La novela nos narra la historia de Bathsheba Everdene, mujer culta y formada, pero sin recursos y con un toque vanidoso, que conoce al hacendado Gabriel Oak y rechaza su propuesta de matrimonio porque quiere ser independiente y no depender de un hombre. Pero la vida dará un giro de 360 grados para los dos cuando Oak pierde su hacienda y todos sus bienes, y por el contrario Bathsheba hereda las propiedades de su tío. A partir de aquí, la novela se convierte en un verdadero culebrón, un tira y afloja sentimental aderezado por varios personajes secundarios de una potencia increíble y con su dosis de misterio e intriga.

¿Qué falla entonces en esta novela para mí? Pues que tanto drama y tira y afloja sentimental se hace excesivo, hay partes en que ya es rizar el rizo y se hacen repetitivas, la trama se estira demasiado, no avanza. Hay que tener en cuenta, que en su día, fue una obra publicada como un serial mensual, con lo cual, se intentaba estirar la historia al máximo. Esta forma de publicación se ve también en los títulos de los capítulos, que nos ofrecen un pequeño resumen de lo que vamos a encontrar en ellos, forma curiosa y que me llamó mucho la atención, aunque ojo, porque os podéis comer algún spoiler inevitable. El final es quizá un poco precipitado también, e injusto con el resto de la novela y con varios de los personajes, con los que el autor no tiene piedad.

Una obra que ha sido también marcada como feminista, a través de una mujer protagonista fuerte, independiente y luchadora, que desafía los convencionalismos sociales y se pone al frente de una granja ella sola en contra de los machistas estándares sociales. Sin embargo, conforme avanza la novela se me ha diluido totalmente este personaje, su fuerza e independencia desaparecen bajo el manto del amor y el personaje de desdibuja totalmente.

Es una sensación extraña este libro, un tira y afloja, he disfrutado mucho de su lectura, pero al mismo tiempo he sentido que me faltaba algo, que no estaba ante el gran clásico universal que todo el mundo me vendía.

Novela recomendable y muy disfrutable, pero sin expectativas.